
Ten en cuenta también que los árboles actúan como sumideros de carbono, es decir, retienen el CO2. Por ello, apoyar medidas que eviten la deforestación de los bosques o impulsen la plantación de nuevos árboles, en especial de especies autóctonas, contribuye a reducir el exceso de CO2 en la atmósfera reduciendo tu huella de carbono. Cada especie tiene una capacidad de absorción de CO2 diferente, estos son algunos ejemplos por árbol teniendo en cuenta un periodo de 30 años:
- Castaño (castanea sativa): 150 kg CO2 por árbol.
- Pinus radiata: 1,15 t CO2 por árbol.
- Pinus pinaster: 550 kg CO2 por árbol.
- Plátano de sombra (platanus hispanica): 650 kg CO2 por árbol.
- Encina (querqus ilex): 150 kg CO2 por árbol.
- Pinus sylvestris: 100 kg CO2 por árbol.

Ten en cuenta también que puedes compensar tus emisiones de CO2 con la aportación voluntaria de una cantidad económica, proporcional a las emisiones generadas, en un proyecto que absorbe una cantidad de toneladas de CO2 equivalente a la generada en nuestra actividad. Fuente: Comunidad #PorElClima