martes, 20 de enero de 2015

El árbol del viento

Tres años de investigación han sido necesarios para que un equipo de ingenieros franceses diseñen su interpretación de la energía eólica para ciudades. El árbol del viento tiene casi 8 metros de altura, y sus ramas adornan la ciudad de Pleumeur-Bodou en Bretaña, en el noroeste de Francia.

Jérôme Michaud-Larivière, el fundador de la compañía de “New Wind”, comenta que
La idea se me ocurrió en una plaza donde vi como las hojas temblaban cuando no había ni un soplo de aire.
Luego barajó la hipótesis de que la energía
tuvo que venir de alguna parte y ser traducible en vatios. Otras ideas y diseños modernistas de turbinas han llegado a los titulares de los periódicos, pero el árbol del viento es la primera que integra completamente la forma y función en lugar de ser un añadido.”
El árbol del viento estará de exhibición en París, concretamente en la Plaza de la Concordia.

El árbol del viento utiliza pequeñas hojas que se alojan en las ramas de este árbol turbina artificial. La disposición de las hojas les hace producir energía sin tener en cuenta la dirección del viento. Generan energía a partir de velocidades de viento de alrededor de 2 metros por segundo. Todo en completo silencio, una ventaja gran ventaja para la ciudad, ya que las otras tecnología de turbinas de viento puede ser muy ruidosas y no aptas para las zonas urbanas.

Por ello, este tipo de turbinas son menos molestas que otros diseños y podría ser utilizada en muchos lugares como jardines, plazas, parques y centros comerciales. Las unidades costarán alrededor de 29.000 euros y pueden ser conectadas entre sí. De lejos pueden parecer esculturas, los árboles del viento podrían ser usados como arte callejero que también da vida a las ciudades.

En este vídeo os quedará bastante claro su funcionamiento:

miércoles, 14 de enero de 2015

Los bosques tropicales deforestados aceleran su recuperación

Los bosques tropicales que han sido víctimas de talas o deforestaciones para uso agrícola reaccionan acelerando su propia recuperación, capturando nitrógeno y carbono más rápido, según una investigación científica divulgada  recientemente.

Según los investigadores, este descubrimiento “tiene implicaciones de largo alcance para los proyectos de restauración de bosques orientados a mitigar el calentamiento global”. “Este es el primer caso concreto que muestra cómo la fijación de nitrógeno por los árboles tropicales afecta directamente la tasa de recuperación de carbono después que los campos agrícolas son abandonados”, aseguró el investigador Jefferson Hall, del STRI. “Los árboles inician y detienen la fijación de nitrógeno de acuerdo con la necesidad de nitrógeno en el sistema”, agregó el investigador, de acuerdo al comunicado. Hall dirige en un sector de 250 hectáreas en la cuenca del Canal de Panamá, una investigación destinada a averiguar el comportamiento de los bosques tropicales maduros y los árboles nativos en parcelas de pastizales abandonados en proceso de restauración forestal. 

En ese lugar, los expertos compararon la tasa de crecimiento de los árboles y de los niveles de nitrógeno en pastizales abandonados hace dos, doce, treinta y ochenta años con árboles que crecieron en los bosques maduros. Las especies de árboles que “fijaron” nitrógeno de la atmósfera acumularon peso en carbono hasta nueve veces más rápido que sus vecinos que no lo fijan en las primeras etapas de la recuperación del bosque, aseguraron los investigadores. Los fijadores de nitrógeno proporcionaron suficiente fertilizante de nitrógeno en el suelo para facilitar el almacenamiento de 50.000 kilogramos de carbono por hectárea durante los primeros 12 años de crecimiento, agregaron. 

Para la autora principal del estudio, Sarah Batterman, la diversidad, en este caso tiene una importancia. “Cada especie de árbol fija nitrógeno y carbono de manera diferente, así que especies importantes a los 12 años desaparecen o se vuelven menos comunes a los 30 años. Realmente se puede ver cómo distintos actores contribuyen al desarrollo de un bosque tropical maduro y a los servicios ambientales que prestan”, afirmó. En el proyecto, desarrollado en Panamá, colaboraron científicos de las universidades de Princeton, de Yale (EE.UU.), de Wageningen (Holanda), de Copenhague (Dinamarca), y del STRI.         Fuente: EFE verde

domingo, 4 de enero de 2015

Los 12 árboles más antiguos del mundo

Éstos son los árboles más antiguos que se han preservado en el planeta. Los árboles más sabios y guardianes, con miles de años de serenidad y una fortaleza que los mantiene en pie hasta el día de hoy.
“Nada hay más ejemplar y más santo, qué un árbol hermoso y fuerte”, Herman Hesse.


1. Matusalén
Este pino longevo (o bristlecone pine) tiene 4.841 años de edad. Es, oficialmente, el organismo vivo más viejo del mundo. Se encuentra en algún lugar de las Montañas Blancas de California, sin embargo, su locación específica es mantenida como un secreto para protegerlo del público (una especie más vieja llamada Prometeo, que tenía alrededor de 4.900 años de edad, fue talada por un investigador en 1964 con el permiso del Forest Service de E.U.).

 
2. Tejo Llangernyw
Este impresionante tejo reside en un pequeño cementerio en la iglesia St. Dygain, en Llangernyw, Gales. Con cerca de 4.000 años, el tejo fue plantado en algún momento de la Era Prehistórica de Bronce, y sigue creciendo. En 2002, en celebración del Golden Jubilee de la Reina Isabel II, el árbol fue designado como uno de los 50 árboles ingleses importantes por el Consejo de los Árboles. 

 
3. Zaroastrian Sarv
También llamado Sarv-e Abarqu, es un ciprés que habita en la provincia de Yartz, en Irán. Se estima que el árbol tiene al menos 4.000 años y, habiendo visto pasar toda la historia de la civilización, es considerado un monumento nacional iraní.
Muy probablemente este hermoso ciprés es el organismo vivo más viejo de Asia.


4. El Senador
Localizado en Florida, el Senador es el ciprés calvo más viejo de los Estados Unidos, y es considerado como el más viejo de su especie. Se estima que tiene alrededor de 3.500 años de edad. Su tamaño es realmente impresionante ya que ha sobrevivido varios huracanes, incluyendo uno en 1925 en el cual redujo su tamaño a 40 pies.


5. Alerce
El alerce es un nombre común para la especie Fitzroy cupresácea, un árbol altísimo nativo de los Andes. Es difícil saber cuántos anos pueden llegar a vivir estos árboles, ya que la mayoría de los especímenes más altos fueron talados en los siglos XIX y XX. Muchos botánicos creen que son los segundos árboles más longevos de la Tierra después del bristlecone de Norteamérica. Al día de hoy, el más viejo de todos es de 3.640 años.

 
6. Patriarca da Floresta
Este árbol, un ejemplo de la especie Cariniana legalis, habita en Brasil y se estima que tiene alrededor de 3.000 años. Se cree que es sagrado, pero su especie está en grave peligro debido a la deforestación de Brasil, Colombia y Venezuela.


7. El olivo de Vouves
Este antiguo árbol de olivo está en la isla de Creta, en Grecia, y es uno de los siete olivos en el Mediterráneo con al menos 2.00 años de edad. Aunque su edad exacta no pueda ser verificada, el olivo de Vouves podría ser el más viejo de ellos, estimado en más de 3.000 años. Aún produce olivas, que son altamente cotizadas. Los olivos son resistentes al fuego, a inundaciones y a enfermedades, en parte por ello es que pueden vivir tantos años y seguir dando deliciosos frutos.