Actualmente, las grandes ciudades
son invadidas por enormes edificaciones, ocasionando que las áreas verdes y los
espacios abiertos, donde refugiarse los millones de especies animales que habitan las ciudades, sean escasos y se conviertan en bienes muy preciados.
Koen Olthuis, arquitecto de la firma holandesa
Waterstudio, lanzó el proyecto "El Árbol del Mar" (Sea Tree) que
consiste en una infraestructura capaz de albergar a un ecosistema rico en flora
y fauna como aves, abejas, murciélagos, entre otros. Además, éste se extenderá
hasta el fondo del mar para que puedan habitar los animales acuáticos.
El Sea Tree estaría rodeado por
una red y tendría paredes lo suficientemente escarpadas como para impedir el
acceso a personal no autorizado y podría constituir una forma de demostrar
buenas intenciones ecológicas y preocupación por el medio ambiente de grandes
compañías (petroleras, por ejemplo), que los podrían donar a las ciudades.
Un proyecto muy ambicioso, como costoso, pero ¿el objetivo no merece la pena?. Al menos ésas son las palabras
del propio Waterstudio que, además, considera su proyecto idóneo para sitios
como Nueva York.
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